Todos desearíamos que nuestras mascotas hablaran y pudieran expresarnos sus sentimientos, angustias y molestias… pero, como la realidad es otra, nos toca ser traductores al momento de tratar de entender qué le pasa a nuestro peludito.
Los perros sí avisan cuando se sienten mal, hay señales que indican que debemos llevarlo al veterinario. Lo importante debe ser saber cómo actuar y cuándo ir con un veterinario. Detrás de un pequeño cambio físico del perrito, podría haber un problema de salud.
A continuación, algunos síntomas que indican que debemos prestarles más atención a nuestros perros.
Nariz seca
Puede indicar fiebre, o también, infecciones o gripa.
Mucha sed o mucha orina
Que un perro beba mucho y orine mucho podría significar que ha desarrollado una diabetes, esta se detecta fácilmente porque la frecuencia con la que bebe, cambia.
En estos casos es común que el animal, aun así esté educado para esperar y salir a la calle, se orine dentro de la casa. Si pasa con mayor frecuencia, hay que ir donde un especialista.
La diabetes se manifiesta con un aumento del apetito acompañado de una llamativa bajada de peso. La respuesta se encuentra fácil en el veterinario. Un simple análisis de azúcar en sangre detecta si el animal es diabético o no.
Sangre en la orina o poca orina
Si tu peludito orina muchas veces pero en poca cantidad, probablemente puede tener cistitis. Es importante fijarse si tienen sangre en la orina, porque esto puede indicar una prostatitis en los machos, o problemas de ovarios o útero en las hembras.
Mal pelaje
El mal pelaje o incluso la alopecia, tanto general como localizada, pueden ser signos de enfermedades cutáneas como alergia, sarna u hongos.
Falta de ánimo
El estado anímico de un perro lo dice todo. Si decae es que está pasando algo. A la más mínima alteración, se recomienda ir al veterinario.
Respiración rara
Los dueños saben cómo es su mascota, por ende, saben reconocer la respiración de su perro. Una respiración rara podría catalogarse como una respiración por encima o por debajo de lo habitual. La frecuencia de respiración en reposo suele ser entre 15 y 30 respiraciones por minuto.
Vómito o diarrea
Lo normal es que los vómitos y la diarrea sean por una gastroenteritis, pero no necesariamente tiene que ser ese el motivo. Puede ser también por algún alimento que no esté acostumbrado a comer.
Con un cambio de dieta, la gastroenteritis suele pasarse en un día, pero si se prolonga hay que llamar al veterinario.
Mal caminado
Lo más común puede ser un traumatismo por un golpe, pero, si el perrito ya es viejo, un mal caminado puede indicar otros problemas de salud como osteoporosis, artritis o artrosis.
Bultos
Como en los humanos, un bulto anómalo podría ser indicativo ser un tumor. Para estos casos, es mejor que lo revise un especialista.
Secreción de oídos
Puede indicar infección. Si tu peludito acumula mucho cerumen no deben utilizarse copitos, para removerlo se recomienda usar algodón.
Mucha saliva
Puede indicar heridas, quemaduras o infecciones.
Ser buenos observadores del detalle puede evitarnos un mal rato. Si atentos a los cambios de nuestros peluditos estamos, tendremos más tiempo para reaccionar a sus malestares. Recuerda, ellos no pueden hablar, pero sí manifiestan sus síntomas
